‘Turbosiestas’ para rendir mejor
– Varios estudios afirman que un breve descanso de 10 a 20 minutos tiene efectos benéficos
– Las empresas empiezan a mostrar interés pese al tópico que repudia dormir en el trabajo
Los tiempos modernos parecían haber acabado con la buena siesta de toda la vida. El “yoga ibérico”, como lo llamaba Camilo José Cela, desaparece poco a poco de nuestra vida diaria, aplastado por el peso de los horarios continuos, la falta de lugares adecuados y, sobre todo, por la mala imagen que da dormir —o dormirse— en el lugar de trabajo.