POLISOMNOGRAFÍA

La polisomnografía consiste en el registro de la actividad cerebral, de la respiración, del ritmo cardiaco, de la actividad muscular y de los niveles de oxígeno en la sangre mientras se duerme.
Es una prueba indicada para el estudio de distintos trastornos de sueño y se realiza durante la noche.

Previamente al comienzo de la prueba es necesario la preparación del paciente para el estudio, para ello se aplican unos electrodos (sensores) en el cuero cabelludo y en otras partes de la cara y cuerpo, así como distintos sensores para valorar la función cardiorrespiratoria.
La duración del estudio es de unas 8-9 horas, por lo que acudirá a la clínica a las 21:30 horas, permaneciendo en ella hasta las 7:00 horas aproximadamente. Al día siguiente se retirarán todos los electrodos (algunos de ellos con un disolvente), pudiendo después continuar con la actividad normal.

Preparación para la Polisomnografía

Antes de someterte a una polisomnografía, es importante seguir ciertas pautas para garantizar resultados precisos:

  • No tomar estimulantes (té, café, colas, alcohol, etc.) ni dormir siesta el día de la prueba.
  • Venir cenado, con el pelo limpio y sin laca ni otros productos similares.
  • Es recomendable no tener las uñas pintadas.
  • Tomar la medicación habitual, con la excepción de fármacos que puedan afectar al sueño, en ese caso es recomendable consultar al personal sanitario antes de tomarlos.
  • Traer pijama y sus útiles de aseo.

Durante la Prueba

Durante la polisomnografía, se colocarán electrodos y sensores en distintas partes de tu cuerpo. Estos dispositivos son esenciales para monitorear tu actividad cerebral, ritmo cardiaco, respiración y movimiento muscular mientras duermes.

Posibles riesgos al realizar la prueba

Se trata de una prueba diagnóstica, no terapéutica, cuyos riesgos suelen ser mínimos. En personas con piel sensible, el raspado del cuero cabelludo o de la piel puede producir pequeñas irritaciones, que mejoran espontáneamente con el paso del tiempo.
La PSGN se realiza a sujetos de cualquier edad y en cualquier situación. La única excepción sería en personas con alergia conocida a algunos de los materiales utilizados para la prueba, aunque existe la posibilidad de sustituirlos por otros no alergénicos.
En determinadas situaciones está prueba se puede realizar de manera ambulatoria, es decir, en su domicilio particular, con la supervisión de personal sanitario durante toda la noche para garantizar que se realiza correctamente.

Razones por las que Deberíamos Realizarnos esta Prueba

La polisomnografía no solo es crucial para diagnosticar trastornos del sueño, sino también para comprender mejor la salud general y el bienestar. Este análisis detallado del sueño puede revelar problemas ocultos y ayudar a prevenir complicaciones de salud a largo plazo. Aquí te presentamos algunas de las razones más importantes para considerar la realización de una polisomnografía:

  • Identificación de Trastornos del Sueño: Detecta afecciones como apnea del sueño, insomnio, narcolepsia, y otros trastornos que pueden afectar seriamente tu calidad de vida.
  • Mejora de la Salud Mental y Física: Un sueño de calidad está directamente relacionado con una mejor salud mental y física. La polisomnografía ayuda a identificar los problemas de sueño que pueden estar afectando tu bienestar.
  • Prevención de Enfermedades Relacionadas: Trastornos del sueño no tratados pueden aumentar el riesgo de problemas de salud como enfermedades cardíacas, obesidad y diabetes.
  • Optimización de Tratamientos: Proporciona información valiosa para que los médicos puedan diseñar o ajustar tratamientos específicos, mejorando así la efectividad de las intervenciones.
  • Mejor Comprensión del Sueño Personal: Te ayuda a entender mejor tus propios patrones de sueño, lo que puede ser crucial para realizar ajustes en tu estilo de vida y mejorar tu descanso nocturno.