Año nuevo, vida nueva, sueño nuevo
Las consecuencias de dormir mal son muchas y muy desagradables, y que definitivamente todas suelen ir en contra de nuestro bienestar.
Con la llegada del nuevo año es habitual hacer una lista de propósitos, en estas fechas en la que estamos haciéndonos propósitos para este nuevo año, ¿por qué no comprometernos con nuestra propia salud? Adquirir buenos hábitos a la hora de dormir es relativamente sencillo, efectivo y por supuesto, con unas consecuencias muy beneficiosas.
En general se busca mantener un estilo de vida más sano. Por ello, dormir mejor no debe faltar en esta lista de propósitos de año nuevo. ¿Cómo cumplir el propósito de dormir mejor? Por aquí les dejamos unas cuantas claves.
Definitivamente, un buen descanso es la base para poder cumplir el resto de propósitos: hacer ejercicio, viajar, aprender idiomas… Para mejorar la calidad de vida durante el día es imprescindible mantener un buen descanso por la noche. La falta de sueño aumenta los niveles de estrés, nos vuelve más irritables y genera una mayor sensación de cansancio. Además, también acelera el ritmo de degeneración del cerebro, afectando las capacidades de aprendizaje y memoria. Incluso algunos estudios han relacionado la falta de sueño con un aumento en las probabilidades de sufrir afecciones como un infarto.
Dedicar tiempo a mantener un descanso de calidad es sumamente importante, pero ¿Cómo conseguirlo? Este comienzo de año es un momento ideal para adoptar una rutina saludable que nos facilite un mayor descanso.
Primero que todo, es imprescindible respetar el ritmo de nuestro reloj interno. Es decir, establecer un horario similar cada día al acostarse. Además, es recomendable no trasladar a la cama actividades que estimulan al cerebro, como trabajar, mirar la televisión o usar los dispositivos móviles. Hay otras actividades que ayudan a conciliar el sueño, como la meditación o leer un libro. No obstante, muchos expertos afirman que asociar la cama sólo con el descanso es fundamental para conciliar el sueño. También es importante que las cenas sean livianas, así como evitar el consumo de sustancias estimulantes por la noche como la cafeína. Un descanso de calidad no requiere siestas, pero si necesitas energía para afrontar la tarde es necesario recordar que no debe durar más de 30 minutos. Muchos estudios insisten que una siesta más extensa podría retrasar el sueño.
Respecto al ejercicio, otro gran propósito de año nuevo, es recomendable practicarlo por la mañana. Además de activar el cuerpo favorecerá un descanso de calidad durante la noche.
En fin, si estamos planeando tomar decisiones ahora que comienza un nuevo año, tal vez deberíamos también proponernos dedicar más tiempo al descanso y al sueño reparador del cuerpo y la memoria.
Ya hemos descrito algunas cosas que podemos hacer esta misma noche para comenzar a dormir mejor: Reserve su dormitorio solo para dormir y pasar momentos de intimidad con su pareja, evite la cafeína durante las horas de la tarde, saque el televisor del dormitorio y deje su teléfono en la sala y en silencio.
Dormir mejor y el tiempo suficiente, comer saludable, hacer ejercicio, bajar naturalmente de peso y sentirnos en plenitud. ¿Qué más podemos pedirle al año nuevo?